Para facilitar la comprensión de las
siguientes entradas, comenzaremos con un pequeño recordatorio de
ciertos conceptos básicos.
Alelo: Cada una de las distintas formas de un gen.
Analogía: Estructuras de distinto origen evolutivo que cumplen funciones parecidas por medios semejantes en especies diferentes.
Acervo génico: Conjunto de genes de una población.
Carácter hereditario: Cualquier característica de un organismo que es susceptible de ser transmitida de generación en generación.
Convergencia evolutiva: características que surgen como adaptaciones convergentes a un mismo modo de vida.
Divergencia evolutiva:diferenciación de un mismo carácter como consecuencia de su adaptación a diferentes modos de vida.
Eficacia biológica: Proporción de genes de un individuo en el total de la siguiente generación.
Evolución: Cambio de las frecuencias alélicas en el acervo génico de una población a lo largo de muchas generaciones.
Fenotipo: Manifestación física -y por lo tanto único observable- de los caracteres hereditarios. Todo fenotipo es consecuencia de la acción de un determinado genotipo en un ambiente concreto y tanto un cambio del genotipo como un cambio ambiental pueden afectar drásticamente al fenotipo final.
Flujo génico: Desplazamiento de alelos de una población a otra.
Gameto: Células sexuales haploides de los organismos pluricelulares.
Gen: Factor hereditario que determina una característica biológica de un organismo.
Genotipo: Constitución genética de un organismo.
Heterozigosidad: Fracción de los individuos de una población que son heterozigotos.
Homología: Semejanza entre dos especies como consecuencia de caracteres heredados de un antecesor común.
Mutación: proceso que posibilita el cambio de un estado hereditario a otro diferente. Se presenta como el origen último de la variación genética de los organismos.
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